Esta obra única captura al rebeco, un elegante y ágil habitante de las montañas, con un detallado dibujo a bolígrafo que resalta la delicadeza y la fuerza de este animal. El fondo pintado al óleo complementa la imagen, mostrando su entorno natural en las alturas rocosas. La técnica mixta enfatiza los detalles de su pelaje, cuerno y postura en una fusión de realismo y expresión artística. Ideal para quienes buscan una pieza que celebre la gracia y la resistencia de este símbolo de la fauna montañosa.