El corzo: especies y subespecies
El corzo es un animal extremadamente flexible que puede vivir tanto en bosques cerrados como en pastizales abiertos. Es una especie solitaria que no vive en grupos como la mayoría de los ungulados europeos, y es muy adaptable gracias a la falta actual de depredadores naturales. Gracias a su gran aclimatación a los distintos hábitats, puede ocupar una variedad de ambientes forestales: bosques caducifolios, bosques mixtos y bosques de coníferas, pero también se adapta a bosques que se encuentran en un estado degradado y en condiciones más duras, como matorrales o pastizales. Le gustan los paisajes con incrustaciones de bosques y sembrados, con capas de árboles, arbustos y pastos, por lo que se adapta bien a las áreas agrícolas modernas. Es por ello que podemos encontrarlo en gran parte de Asia y de Europa.
Distribución del corzo: Asia y Europa
Encontramos en el planeta dos especies de corzo, el asiático y el europeo. Aunque el corzo siberiano o asiático es considerado especie desde 2007, antes era una subespecie del europeo.
La variedad de Asia tiene una cornamenta más grande y con más ramificaciones, su tamaño también es superior (puede llegar a los 60kg). Además del nordeste del continente asiático, habita en Kazajistán, el este del Tibet y la península de Corea. Por el oeste llega hasta los montes Urales y el Cáucaso, donde coincide con el corzo de Europa. Esta especie se encuentra en un progresivo declive desde hace décadas, debido a los incendios y la caza furtiva.
Una característica muy curiosa de esta especie, son sus movimientos estacionales. Es solitario en verano (las hembras permanecen con sus crías), pero en invierno forma grupos mixtos de hasta 20-30 individuos. Durante los movimientos estacionales, el tamaño del grupo aumenta hasta 500 ejemplares. En la provincia de Amur (Rusia), la especie migra cada año desde las áreas invernales hasta las de verano, con migraciones de hasta 200 km3.
Dentro del corzo europeo existen gran variedad de subespecies y razas dependiendo de su localización geográfica y de los diferentes autores, aunque de manera oficial la Unión Internacional para la conservación de la Naturaleza (IUCN) solo reconoce 5 subespecies de corzo europeo.
Este cérvido está presente en la mayoría de Europa, con la excepción de Irlanda, Grecia y norte de Escandinavia. Alemania es el país que más densidad de población tiene y con las capturas más altas, además allí puede cazarse el corzo negro de la Baja Sajonia (un ejemplar único en el mundo).
Subespecies en España
El corzo ha experimentado un gran aumento de su población, como consecuencia del abandono del medio rural y de unas prácticas cinegéticas más racionales y de gestión.
En la Península tenemos tres de ellas Capreolus capreolus canus (Centro de España), Capreolus capreolus decorus (Norte de España) y Capreolus capreolus garganta (Sur de España o corzo morisco).
Si quieres saber más sobre el corzo del norte de España y acompañarnos en nuestra aventura dándoles caza, te dejamos el link a nuestra serie en Cazavisión: "El corzo del norte" https://plus.cazavision.com/el-corzo-del-norte
El corzo morisco
Su distribución geográfica es la más meridional que existe, ya que se ha adaptado al sur de España, concretamente a las sierras de Grazalema, Ronda y Los Alcornocales. El clima atlántico que se forma en esos territorios ha formado un hábitat muy singular, que ha hecho que los corzos que los habitan, desarrollen características propias.
Es un tipo de corzo ligeramente menos pesado y con una tonalidad más grisácea de pelaje durante todo el año. El clásico babero más claro, que lucen otras poblaciones, no aparece en el corzo morisco. También tienen una mandíbula más corta y ancha, esto seguramente se deba a la alimentación más dura de tallo. Debido a la latitud de su rango de distribución, puede decirse que su ciclo vital se adelanta un mes.
Autor: María Balletbó